martes, 15 de abril de 2014
Capítulo 2
No se sabía si llovía en el cielo o en sus mejillas. Pero ya era el clima habitual de su rostro. Un llanto sincero y rápido. Sus pupilas se habían acostumbrado y habían adquirido un verde mar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario